Mujeres Arhuacas, memoria y tensiones políticas: Participación de Juliana González en artículo para la Zeitschrift für Friedens und Konfliktforschung.

Mujeres Arhuacas, memoria y tensiones políticas: Participación de Juliana González en artículo para la Zeitschrift für Friedens und Konfliktforschung.

La colaboradora científica del Instituto Colombo-Alemán para La Paz—CAPAZ, Juliana González, publicó recientemente en la revista alemana Zeitschrift für Friedens und Konfliktforschung (Revista de Estudios sobre Paz y Conflictos) un artículo escrito junto a Ángela Santamaría, Dunen Kaneybia Muelas Izquierdo, Laura María Restrepo Acevedo y Paula Cáceres Dueñas, investigadoras de la Universidad del Rosario, una de las universidades aliadas de CAPAZ.

El artículo se titula Arhuaco indigenous women’s memories and the Colombian Truth Commission: methodological gaps and political tensions (La memoria de las mujeres indígenas Arhuaco y la Comisión de la Verdad de Colombia: brechas metodológicas y tensiones políticas). En este, las investigadoras hacen un análisis de la manera como se llevó a cabo la construcción de un informe que hicieron junto con las mujeres arhuacas. Este fue presentado ante la Comisión de la Verdad (CEV) en julio de 2020, en un evento virtual apoyado por el Instituto CAPAZ como aliado en de la Universidad del Rosario y  de la Comisión de la Verdad. Puede visitar la nota publicada por el instituto a propósito del evento de presentación acá

Si bien en la realización del informe se destacó el enfoque diferencial – interseccional (étnico y de género) de la CEV, lo cual ha sido un elemento llamativo en el contexto de las comisiones de la verdad a nivel mundial, en su artículo las investigadoras proponen un análisis crítico de la metodología y del proceso de esclarecimiento llevado a cabo en la realización del mismo. Así, en el texto se plantean una serie de brechas metodológicas y tensiones políticas que se hicieron evidentes en desarrollo del informe.

Puede ver la transmisión de la presentación del informe (Zaku Seynekun Nun nokwuzanamu: voices of mother earth) acá.

 

(Foto tomada de: Escuela Intercultural de Diplomacia Indígena)

La importancia política y espiritual del cuerpo de la mujer Arhuaca

Una de las brechas metodológicas que las investigadoras pudieron reconocer en este contexto fue el de la importancia que tiene en términos políticos y espirituales el cuerpo de las mujeres como representación humana del territorio de la Sierra Nevada. Esto es importante entenderlo porque es un mandato que constituye y permea muchas de las relaciones sociales que se tejen entre individuos y con el territorio mismo. Así, en el artículo, se menciona que durante muchos años el trabajo de las mujeres Arhuacas ha sido legitimar su figura como lideresas espirituales y políticas de la comunidad. Este trabajo constituye en sí mismo una metodología de trabajo y resistencia, y es ahí donde la CEV entra a hacer disonancia: hablar y nombrar las experiencias traumáticas que se dieron en el marco del conflicto armado no es en sí una manera de tejer y fortalecer los vínculos que el conflicto destruyó. En cambio, reconocer a las mujeres como la representación del principio femenino de todo lo que existe en el universo, es su posibilidad para garantizar su derecho como autoridades políticas, tradicionales espirituales y culturales de acuerdo con la Ley de Origen.

 

Diferencias epistemológicas y de lenguaje al acercarse al pasado

Otro punto importante que mencionan las investigadoras en su texto es la diferencia que hay entre el hecho de privilegiar la reconstrucción fáctica de los hechos violentos y la manera Arhuaca de entender el pasado en términos ontológicos. En esta comunidad hay un “principio ético de no violencia que enseña que para poder reparar y armonizar los desequilibrios físicos y espirituales que dejan los hechos violentos, la violencia no debe ser nombrada”. Así, el mandato de la CEV, que, a pesar de ser importante en su misión de recolectar y sistematizar los procesos violentos que se han llevado a cabo en distintos lugares del país, estaría omitiendo un componente fundamental de la cultura Arhuaca en su proceso de establecer equilibrio tras un suceso victimizante.

Además, otra brecha que hay en este sentido es que, muchas veces, la manera de concebir el tiempo de las comunidades indígenas no es lineal. Para los Arhuacos, “el tiempo que tenemos ante nosotros es el tiempo que ya pasó”, con lo cual, se complica la narración de hechos violentos que ocurrieron en el pasado (siendo este un término usado en espacios occidentales distintos al de los ahruacos mismos).

(Foto tomada de: Escuela Intercultural de Diplomacia Indígena)

Obstáculos para la plena participación de las mujeres indígenas en el proceso de búsqueda de la verdad

Por último vale la pena destacar lo que las investigadoras llamaron una “tensión política” a la hora de construir un relato sobre la verdad: “La experiencia de las mujeres Arhuacas ante la CEV también destaca que otro obstáculo para la plena participación de las mujeres indígenas en los procesos de búsqueda de la verdad son las relaciones de la institucionalidad con líderes indígenas que, según interpretaciones “ortodoxas” de las leyes tradicionales, continúan reclamando que las mujeres indígenas no pueden interferir con el Estadoestatales”.

 

 

Puede consultar el artículo completo acá.

De interés: «Las arhuacas también vivieron violencia sexual por parte de militares» – Colombia2020 El Espectador